Noé Salinas Brondo

INGENIERÍA

Ingeniero Mecánico Electricista de la UANL, en 2018 cumplirá 50 años de ejercer la profesión. Con 30 años en la industria de Tecnologías de Información (TI), fundó tres microempresas de TI y durante 15 años laboró como Director de la carrera de Licenciado en Informática en la U-ERRE.

Sus mejores logros fueron: Ofrecer a los alumnos de los últimos grados la impartición de materias en horarios nocturnos y en los fines de semana, mejorando así el número de alumnos titulados. Promover las reuniones periódicas con exalumnos. Promover la creación de la sociedad de alumnos, con el compromiso de crear anualmente un simposio en TI dentro de la Semana de Ingeniería, elegir entre las jóvenes a la Reina que los representara y, al final de su periodo, convocar a elecciones. Actualizar los programas de estudio y crear tres nuevas carreras y una maestría, obteniendo la acreditación de la ANUIES, órgano rector que certificó la carrera de IDAC por cinco años.

Contrató a maestros con grado de doctorado o maestría y/o certificados en las áreas de TI, becó a otros y obtuvo su certificación técnica de diferentes empresas en TI. Fomentó la relación con las diferentes asociaciones de profesionistas en TI, así como con empresas y universidades hasta lograr el reconocimiento general de pertenecer al selecto grupo de las cinco mejores universidades en Nuevo León. Esto ayudó a que fuera invitado a la creación del primer Clúster de TI en N. L. Csoftmty, formando por el gobierno, empresas y universidades. Creó el concepto escuela-industria, donde los alumnos podían trabajar y estudiar en un mismo lugar; el alumno participaba con su trabajo (seis horas), la U-ERRE le brindaba una beca y los papás una pequeña parte o nada. Éste fue un programa donde se tenía el concepto de ganar-ganar-ganar. Aprovechando este concepto y la buena disposición del Lic. Nicolás Palacios y su personal de las preparatorias U-ERRE, se creó un programa semejante con mucho éxito, formando una especialidad en el bachillerato (BANE).

Sin embargo, su mejor logro fue que tanto sus alumnos como los padres de familia lo reconocieran primero como su asesor personal.

Desde el principio como director se propuso conocer a todos sus alumnos por su nombre, luego pasó a ser reconocido como su amigo y terminar como si fuera uno más de su familia (papá Noé). Luego de su jubilación han pasado siete años y aún le hablan para todo tipo de cosas: ha asistido a sus bodas, le han participado de la llegada de sus hijos, de sus éxitos profesionales, sus viajes, así también de la pérdida de algún familiar, de fiestas de celebración de exaU-ERRE.

Cuenta con amigos en Facebook donde todos los días mantiene comunicación, festejan todos sus eventos familiares y hasta siguen los relatos que hace de su juventud con la persona que más ha amado y quien lo ha acompañado toda la vida: su esposa Rosita, como todos la conocen.